Ataque ransomware paraliza a la más grande procesadora de carne del mundo

MIE, 2 / JUN / 2021 Ataque ransomware paraliza a la más grande procesadora de carne del mundo Las plantas en Estados Unidos y Australia han tenido que dejar de trabajar. Se sospecha que el grupo criminal tendría su base en Rusia.

Un grupo de criminales informáticos ha hackeado, con un programa ransomware, a la compañía procesadora de carne más grande del mundo.

El objetivo fueron los servidores de los sistemas IT, los servidores de respaldo no fueron afectados. Sin embargo JBS ha tenido que suspender sus actividades en las plantas de los Estados Unidos, Canadá y Australia.

JBS es la responsable del 25% de la carne procesada en Estados Unidos y del 20% en Australia.

Recuperación

El gobierno australiano adelantó que podrían pasar días antes de que la producción se reinicie.

El martes la compañía declaró que había conseguido avances significativos para resolver la situación y que la gran mayoría de las plantas volverían a ser operacionales durante el miércoles. De esta manera se intentó calmar las alarmas por un posible aumento de los precios.

Este tipo de recuperaciones casi inesperadas han hecho que en muchos casos se levanten sospechas sobre un posible pago del rescate a los grupos criminales.

Origen

Según JBS Brasil el ataque fue realizado por una organización criminal que tendría su base en Rusia. El gobierno estadounidense ha puesto al FBI a investigar la situación y se ha contactado con el gobierno ruso.

Cabe recordar que hace unas semanas se produjo un ataque ransomware sobre la empresa Colonial Pipeline que se encarga de la distribución de combustible en la costa oeste de los Estados Unidos. En este caso el grupo criminal fue identificado claramente como también su vínculo con Rusia.

Criminales hackean y bloquean la distribución de petróleo en la costa este de los Estados Unidos

En el pasado se han descubierto vínculos entre organizaciones de criminales informáticos y las agencias de inteligencia rusas.

Los últimos dos ataques han comprometido a empresas privadas, pero también han afectado a piezas claves de la infraestructura de los Estados Unidos.

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Fuente: RedUsers