Ellas, líderes del cambio tecnológico 

En plena era digital, la ratio de participación hombre-mujer en el sector tecnológico es de 70/30 en el mundo. Es decir que aún está muy lejos de la paridad. El tránsito de las mujeres a la industria de tecnología ha sido desafiante, aunque la historia cuenta con muchas que han despejado el camino como, por ejemplo, Augusta Ada King, Condesa de Lovelace, quien creó el primer programa informático, o Margaret Hamilton quien hizo posible que el hombre pisara la luna en 1969. Y a pesar de que el premio Nobel lo han recibido más hombres que mujeres, solo una ha logrado dos galardones: Marie Curie, el de Física y el de Química.

A pesar de esto, la participación de las mujeres en los campos relacionados con las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) es particularmente baja. Datos de la Unesco muestran que, a nivel global, solo el 3% de quienes estudian carreras afines a esta área son mujeres. En otras disciplinas como ciencias naturales, matemáticas o estadística la representación de ellas apenas alcanza el 5%.

Para algunas líderes como Diana Cárcamo, Directora Nacional de Tecnología de Honduras, el llamado es a que más niñas vean en la tecnología sus sueños: “las mujeres que ya hemos hecho este recorrido en el mundo de la tecnología debemos abrir espacios a las que vienen en camino, porque se trata de un reto bonito que ayuda mejorar la vida de la gente y a solucionar los problemas de la humanidad”.

Diana Cárcamo cuenta que cuando era niña su padre la motivó a emprender este camino, estudió Estudio en el Tecnológico de Monterrey de México porque en Honduras no existía la carrera y hoy es la Directora Nacional de Tecnología de Honduras, institución encargada del recaudo de impuestos en ese país. En el 2018 la escogieron para dirigir toda el área de tecnología del Servicio de Administración de Rentas (SAR). Tiene 90 colaboradores a su encargo, quienes en conjunto dan sostenibilidad a una plataforma muy compleja.

En este sentido, ella coincide con el informe de McKinsey que asegura que las empresas que se centran en la diversidad y la inclusión se desempeñan mejor, contratan mejores talentos, tienen empleados más comprometidos y saben retener a los trabajadores. Por esto, asegura esta ingeniera informática, “un líder organizacional hoy debe ser un buen comunicador, integrador, flexible e impulsor de la creatividad y nuevas ideas, así como tener un permanente deseo de superación, características que las mujeres ponen a diario de forma natural”.

Sobre este mismo aspecto, Sandra Guazzoti, Vicepresidente Multicountry de Oracle, dice que “cada vez es más común ver mujeres en cargos directivos o gerenciales en las compañías de tecnología. Somos la mitad de la población e incorporarnos en las decisiones que se toman en las organizaciones es relevante para que sean representativas de la sociedad. Además, tenemos drivers muy específicos y diferentes de los hombres. Entonces, ¿cómo podemos llegar a esas consumidoras si nuestras empresas no incorporan su punto de vista desde la toma de decisiones?”

Sandra Guazzotti tiene una experiencia de más de 20 años en el sector que le ha permitido ser parte del crecimiento de la industria y ver cómo más mujeres están tomando roles de liderazgo como resultado de alzar la voz.

Voz que se une a la de la ingeniera Cárcamo para marcar la pauta con recomendaciones a las mujeres que se desempeñan en la industria de la tecnología. Ratifica que, si bien los retos están presentes a diario, “las mujeres siempre deben partir del sí se puede, y ser líderes del cambio tecnológico”. Y comenta que “la tecnología te da visibilidad. Quienes nos dedicamos a esto tenemos un plus, una ventaja sobre los demás, siempre que se aplique para bien y para mejor la vida”.

Estas dos ingenieras creen fielmente que las mujeres siguen creciendo en el sector y cada vez ocupan un lugar más relevante. Para Guazzotti es necesario que las mujeres tengan más autoconfianza y que crean que tienen las mismas capacidades que los hombres para enfrentar los desafíos. Para Diana siempre deben prevalecer los valores éticos, “pues el respeto frente a los hombres se gana siendo justos, responsables, demostrando nuestras habilidades”.

Entonces, la incorporación de la mujer a la ciencia y la tecnología no es simplemente una reivindicación igualitaria, sino una ventaja económica y social. En ese sentido, fortalecer y crear referentes femeninos, e incrementar las competencias STEM (Ciencias, Tecnología y Matemáticas) en la sociedad y en el mercado laboral es un factor clave para la innovación, la generación de valor y la competitividad de los países. De esta manera, se genera una economía altamente especializada y diversa, equitativa y en constante crecimiento.

Para las nuevas generaciones, es importante tener un mentor que “nos ayude a generar ideas y a crear proyectos, comenta Melissa Thomas, ingeniera y nueva integrante del grupo de pasantes de Oracle Costa Rica. Y agrega que está lista para aprender y trabajar con toda la energía porque le apasiona la manera como la tecnología evoluciona.

De acuerdo con Leandro Ramírez, VP de Oracle para Centroamérica y El Caribe “estamos comprometidos con la equidad y la diversidad porque estamos convencidos de que necesitamos múltiples miradas para ser líderes de las verdaderas transformaciones. En la región trabajamos constantemente en consolidar equipos amplios y diversos, y procuramos llevar este mensaje a nuestra comunidad a través del programa de Oracle Academy para que más niñas se enamoren de la tecnología y quieran soñar sin límites, tal como lo han hecho grandes mujeres en la historia”.

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